El Juzgado de Instrucción número 2 de Utrera (Sevilla) ha dictado una orden de alejamiento contra un hombre acusado de malos tratos a su pareja y ha fijado como lugar de encuentro de éste con su hija la casa de acogida donde se refugia con su madre.

La Consejería de Igualdad de la Junta de Andalucía ha recurrido la orden ante el Consejo General del Poder Judicial, interponiendo una queja ya que considera que la decisión del juzgado no sólo pone en peligro la integridad física de la mujer, sino de todas aquellas mujeres que se encuentran en el casa, según un portavoz de la Consejería.

El juzgado, que explica que existen "indicios racionales de criminalidad" sobre el acusado -que reconoció haber agredido a su mujer-, entiende que la víctima se encuentra en una situación de riesgo y le aplica una orden de protección y dicta una orden de alejamiento del presunto agresor que tiene prohibido acercarse a menos de 300 metros. Además, le prohíbe comunicarse con ella por cualquier medio, y le advierte de que el incumplimiento de esta medida podría acarrearle la cárcel.

Pese a estas medidas de protección el juzgado, en su régimen de visitas a la hija de la pareja de corta edad, le fija como lugar de encuentro la misma casa de acogida donde se refugia con su madre, que califica como "excepción" con las medidas cautelares, y especifica que la entrega de la niña se realizará por un responsable del centro de acogida para evitar el contacto directo entre la pareja.

Por otra parte, la Audiencia Provincial de Cantabria ha absuelto de un delito de violencia de género a un hombre al que un juzgado condenó a nueve meses porque supuestamente agredió a su esposa.