La posibilidad de compartir fotos a través de internet y, en especial, a través de las redes sociales ha supuesto un avance en las relaciones pero también ha sido utilizado para cometer delitos, como es el caso de la pornografía infantil. Por ello, Facebook ha adoptado una nueva tecnología para poder detectar fotos ilegales que incurran en delitos de pederastia.

Esta herramienta identifica aquellas imágenes, incluso las que han sido recortadas o modificadas, que podrían constituir un delito. El análisis de las fotografías se va realizando por bloques, examinando cada imagen por partes. Después se compara con los datos almacenados por el National Center for Missing & Exploited Children.