El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia ha declarado nulos los nombramientos de los representantes sindicales en los consellos sociales de las tres universidades gallegas y obliga a designarlos de nuevo. La sentencia da así la razón a la CIG, que había presentado un recurso porque este sindicato quedó excluido en el proceso para presentar candidatos.

En los consellos sociales de cada institución académica, que son los órganos donde se discuten las políticas educativas, los sindicatos tienen derecho a estar representados por dos miembros. En el anterior proceso de renovación, que culminó con la orden de 1 de abril de 2008 de la Consellería de Educación recogiendo la nueva composición, UGT y CCOO se repartieron todos los miembros, uno cada sindicato, en los tres consellos sociales, dejando a la CIG al margen.

La sentencia sostiene que el sindicato nacionalista también tiene derecho a participar en el proceso de designación, dado que junto con UGT y CCOO forman la terna de centrales con mayor representatividad en Galicia, y que no tiene sustento legal que la nominación solo corresponda a los dos con mayor presencia en un territorio.

"Dado que son tres los sindicatos que gozan de la condición de mayor representatividad, debe ponerse en marcha el mecanismo que permita a los tres participar en la designación de los dos miembros de cada consello social que pueden proponer", se recoge en la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Si embargo, al TSXG no establece cuál es la fórmula que debe fijar la Xunta para que esta representatividad se plasme en los consellos sociales. Dice que no es de su incumbencia.

El secretario xeral de CIG-Ensino, Anxo Louzao, explicó ayer que están a la espera de que la Consellería de Educación mueva ficha, ya que hasta el momento, según dijo, la Xunta todavía no ejecutado la sentencia.

El dirigente sindicalista sostuvo que lo idóneo sería modificar la ley para permitir que los sindicatos tuvieran la posibilidad de designar a tres representantes, pero que resultaría más complicado, por lo que propone que los seis puestos en juego se repartan entre las tres centrales o que se establezca un sistema de relevos.