España batió el pasado año su propio récord en trasplantes y donantes, con cifras que alcanzaron máximos históricos -4.212 intervenciones y 1.667 donantes, respectivamente-, pero además logró reducir de una forma significativa las negativas de familiares a donar órganos de los fallecidos, de un 19% a un 15,3%. Estos son algunos de los datos ofrecidos por el director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, quien compareció ayer junto a la ministra de Sanidad, Ana Mato, para hacer balance de la actividad en esta materia en 2011, año en el que se realizaron 500 trasplantes más que en el anterior.

Los trasplantes renales (2.494), hepáticos (1.137)y de páncreas (111) alcanzaron cifras récord, como también el número de donantes en general, 167 más que el año anterior, lo que permitió llegar a la proporción de 35,3 donantes por millón de personas. El aumento en más de un 12 %, respecto a 2010, de los trasplantes renales se debe en buena medida al incremento en un 30% de la donación de riñones de personas vivas: en total se realizaron 312 trasplantes con esta modalidad que, según Matesanz, "ha arraigado bien en España".

Los trasplantes de corazón y pulmón, 237 y 230, respectivamente, se comportaron de la misma forma que en 2010 o incluso podrían haber descendido ligeramente, ya que el donante español "va teniendo un proceso de envejecimiento progresivo, que se traduce en que sean órganos más difíciles de conseguir". No obstante, la demanda de trasplantes torácicos tampoco creció.

Ese proceso de envejecimiento de los donantes y la reducción drástica de la siniestralidad vial produce un cambio en la edad de quienes donan sus órganos y que, por primera vez, más de la mitad de ellos (un 53,7%) supere los 60 años. Los de menos de 45 años solo son el 18,4% de los donantes. La edad media de los donantes en general se ha incrementado en dos años hasta situarse en los 58,9.

Los donantes por accidente de tráfico también continúan bajando: solo el 5,1% de este tipo de donantes habían fallecido en un accidente de tráfico.

Rafael Matesanz destacó el esfuerzo de la sociedad española, que ha hecho bajar en cuatro puntos las negativas familiares a donar y que de cada cuatro familias, 85 digan que sí a la donación, si se les pide. Pero el director de la Organización Nacional de Trasplantes también subrayó la reducción de las listas de espera que bajaron en torno a un 5% el pasado año.

Matesanz también hizo referencia a la Guía de Buenas Prácticas en la donación de órganos, cuya aplicación en los hospitales que realizan trasplantes ha sido clave en el importante incremento de las donaciones. Esta guía es un documento pionero en el mundo, redactado por expertos de la sede central de la ONT, coordinadores e integrantes de toda red trasplantadora española. El texto recoge la necesidad de extender la cultura de la donación de órganos en todo el hospital, intensificando la coordinación entre las UCIS, los servicios de urgencias intra y extrahospitalarios y las unidades de ictus. El objetivo es optimizar donaciones.

La ministra Ana Mato destacó estos datos "magníficos" y valoró el esfuerzo de la sociedad española, "que ha vuelto a hacer una demostración de solidaridad en plena crisis económica y social".

La responsable de Sanidad insistió en este balance "muy positivo" de la que es responsable, en su opinión, la sociedad española y su "generosidad". También remarcó la "fortaleza" del sistema nacional de trasplantes, que es líder desde hace veinte años en esta materia, desde que se creó la ONT, fecha a partir de la cual se han realizado 81.909 trasplantes en España.

En concreto, hasta el 1 de enero de 2012 se realizaron en el país 51.909 trasplantes renales, 19.399 hepáticos, 6.528 cardiacos, 2.702 pulmonares, 1.342 de páncreas y 89 intestinales. Actualmente, hay 179 hospitales autorizados para la donación de órganos y 43 de ellos para realizar trasplantes de órganos.

El número de donantes de órganos creció durante el pasado año en casi todas las comunidades, entre ellas Galicia, donde pasó de 85 en 2010 a 87 en 2011. Pero pese a este incremento, la comunidad gallega presenta una de la tasas de donantes más bajas de todo el país. Galicia, con 31,2 donantes por cada millón de habitantes, registra la tasa más baja de toda España, solo por encima de Castilla-La Mancha (28,3). De este modo, Galicia se sitúa por debajo de la media estatal (35,3) y se aleja de la comunidad con mayor porcentaje de donantes: Cantabria (67,8). Tras esta autonomía, La Rioja (62), Asturias y País Vasco (ambas con 46) son las comunidades con mayor tasa de donantes.

Pero no en todas las comunidades aumentó el número de donantes. Madrid, que pasó de 231 a 215 (-16) y Canarias, de 75 a 73 (-2) son las dos únicas que perdieron donaciones en el último año.