El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) recordó ayer a las empresas titulares de redes sociales que desde el 1 de enero deben ser accesibles para las personas con discapacidad. Las empresas que gestionan estas redes deben cumplir una ley -de 1 de agosto- que adapta la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, modificando la regulación anterior, en relación con los servicios de la sociedad de la información y de comercio electrónico.

La nueva ley extiende a las redes sociales en línea las obligaciones de accesibilidad vigentes para las páginas de internet públicas y las de las grandes empresas.

La normativa establece que "las páginas de internet que sirvan de soporte o canal a las redes sociales en línea, desarrolladas por entidades cuyo volumen anual de operaciones, calculado conforme a lo establecido en la normativa del Impuesto sobre el Valor Añadido, exceda de 6.101.121,04 euros, deberán satisfacer, a partir del 31 de diciembre de 2012, como mínimo, el nivel medio de los criterios de accesibilidad al contenido generalmente reconocidos".