El BNG se unió ayer a la denuncia realizada el pasado miércoles por la Asociación Gallega para la Defensa de Víctimas de la Violencia de Género Ve-la Luz sobre las "graves deficiencias higiénicas y de seguridad" del nuevo Punto de Encuentro Familiar (PEF) de A Coruña, y exigió a la Xunta que garantice de "forma inmediata" que el centro cumple con los requisitos necesarios para prestar este servicio.
Los nacionalistas anunciaron, además, la presentación de una batería de preguntas en el Parlamento gallego en las que se interesan por la situación de los seis centros de esas características existentes en Galicia.
El PEF coruñés funciona desde el pasado día 1 en las instalaciones del colegio Santiago Apóstol, tras los problemas detectados en su antigua ubicación, el centro Fonseca.
