Uno de cada tres mayores de 65 años sano sufre caídas al menos una vez al año. Unos accidentes domésticos que merman la calidad de vida de quienes los sufren y tiene repercusiones en la factura sociosanitaria del país. Por ello, uno de los retos para el futuro más inmediato es intentar evitar este tipo de caídas, según indicaron ayer varios expertos en la última jornada del XXV Congreso de la Sociedade Galega de Xerontoloxía e Xeriatría que se celebró esta semana en A Coruña.

"Es un grave problema. Un 20% de las caídas precisan atención médica y el 5% derivan en fractura, convirtiéndose en la lesión que causa más ingresos", indicó el catedrático de Fisiología Javier Cudeiro, quien añadió: "Las caídas reiterativas conducen a una disminución de la autonomía personal por temor a la repetición con el consiguiente aislamiento social".

Cudeiro sostiene que diversos estudios concluyen la necesidad de intentar evitar las caídas para "reducir su impacto social tanto en lo que se refiere a los recursos económicos como humanos". En este sentido, Cudeiro señala que la organización del movimiento está muy relacionada con la estimulación sensorial. De hecho, en pacientes con ciertas patologías como el párkinson -que ven disminuida su movilidad- está comprobado que cierta estimulación rítmica externa hace que mejoren y que superen los bloqueos motores que padecen.

Por otra parte, el presidente de la Sociedade Galega de Xerontoloxía e Xeriatría, José Carlos Millán, abogó ayer por el uso de las TIC para instaurar medidas de apoyo a domicilio que permitan a las personas mayores mantenerse por sí mismos, "sin pensar en acudir una residencia o institución similar". En esta línea habló del sistema de Telegerontología, un dispositivo a modo de centro de control que -bien sea desde el propio domicilio, residencias u hospitales- conecta a la persona usuaria mediante internet, a un centro remoto las 24 horas del día, los 365 días al año, y permite de forma interactiva, visualizar contenidos, registrar actividades o parámetros biomédicos.