El Gobierno busca agilizar la investigación clínica con medicamentos reduciendo las trabas "innecesarias". De este modo lo anunció ayer la ministra de Sanidad, Ana Mato, quien no obstante no esclareció cuándo podrían entrar en vigor los cambios. Como primer paso, su Ministerio ha iniciado el trámite de audiencia pública de un nuevo real decreto sobre ensayos clínicos. "Hay que hacer más atractiva España para hacer ensayos clínicos", defendió ayer la ministra, que espera establecer "unos procedimientos ágiles de autorización".

En la actualidad, se tardan unos 70 días como media en que la Agencia Española de Medicamentos dé permiso para un nuevo ensayo clínico, según datos de Sanidad. La agilización de los trámites no es el único cambio que pretende introducir el Gobierno. La ministra anunciaba ayer también la creación del Registro Español de Ensayos Clínicos. En la actualidad, existe un Registro Europeo así como otros en varios países como Estados Unidos.

La creación de un registro en España en este campo permitiría a los ciudadanos así como a los profesionales del sector médico, farmacológico o veterinario tener acceso a los datos y procesos de los ensayos clínicos autorizados en España. De esta manera, los enfermos podrían solicitar formar parte de los ensayos. Por otra parte, los médicos conocerían el estado actual de investigaciones terapéuticas en las dolencias de su campo. La idea de Sanidad es colgar la información en una web a la que se tendrá acceso desde la página de la Agencia Española de Medicamentos.

El facultativo gallego José María Pego Reigosa, del área de Reumatología del Hospital Universitario de Vigo, reconocía ayer que "la investigación farmacológica es compleja y está llena de aspectos burocráticos y legales". Este médico explica que "si bien es común a otros países", sí podrían tomarse determinadas medidas "para hacerlo algo más sencillo", como "compartir datos de centros y profesionales investigadores".

Respecto a la creación del Registro, Pego Reigosa no ve importantes puntos negativos, pero sí beneficios: "Ofrecer participar en ensayos clínicos adecuados a la situación del enfermo. No siempre el paciente va a poder enrolarse en uno de esos ensayos pues podría no cumplir los requisitos precisos". Para Pego Reigosa, habrá otros casos en los que el enfermo sí podrá ser incluido "con la ventaja de poder recibir un tratamiento potencialmente beneficioso y en el centro más cercano a su lugar de residencia". Quien también ve aspectos positivos en la creación del registro es José Luis Doval, del Hospital de Ourense. "Es importante que el ciudadano tenga acceso a los ensayos clínicos y que quede registrado con información abierta aquellos ensayos que no han continuado", indica.