En junio finalizaba el plazo para que los inmigrantes irregulares se acogiesen al plan de Sergas para mantener su derecho al acceso gratuito a la sanidad. Pero hasta la fecha, de los 3.000 potenciales beneficiarios que hay en la comunidad, solo 776 se han inscrito en este programa que se puso en marcha en colaboración con varias ONG gallegas. La Consellería de Sanidade ha decidido ampliar otros seis meses el plazo para dar margen a que más sin papeles se sumen a la iniciativa y no se queden sin cobertura sanitaria.

Desde el pasado mes de septiembre los inmigrantes en situación irregular dejaron de tener acceso gratuito a la sanidad pública. Solo los menores y las embarazadas tienen cobertura completa. El resto no podrán ir al médico de cabecera y en urgencias serán atendidos pero se les pasará la factura.

En Galicia, sin embargo, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, había garantizado que se mantendría la asistencia sanitaria a los inmigrantes. En colaboración con las ONG se articuló el Programa Galego de Protección Social da Saúde Pública del que se podrían beneficiar aquellos "sin papeles" que acreditaran falta de recursos y llevaran al menos medio año empadronados en Galicia.

Aunque en la comunidad autónoma hay 9.000 inmigrantes irregulares, según datos de la Consellería de Sanidade, solo cumplirían estos requisitos para beneficiarse del programa de asistencia sanitaria gratuita unos 3.000.

Durante los primeros meses, hasta febrero, solo 431 inmigrantes se inscribieron en el plan del Sergas, una cifra muy baja que obligó a la Consellería de Sanidade a modificar el procedimiento. Desde esa fecha cada vez que uno de los potenciales beneficiarios solicitase cita médica se le informaría de la posibilidad de apuntarse al programa.

Este cambio operativo permitió incrementar el número de inmigrantes con cobertura sanitaria hasta las 778. Aún así quedan más de 2.200 inmigrantes sin papeles que pese a cumplir los requisitos no disfrutarán de sanidad gratuita y otros 6.000 que quedarán definitivamente fuera del sistema y tendrán que pagar por recibir atención sanitaria.

Según las tarifas aprobadas por el Sergas el pasado mes de diciembre, los inmigrantes que no entren en el programa de protección social de la Xunta tendrán que abonar 68,9 euros por la primera consulta médica en Atención Primaria. Las siguientes consultas tendrán un coste de 34,45 euros y la atención en los servicios de urgencia de los ambulatorios ascenderá a 255,59 euros. Si acuden al hospital por urgencias entonces la factura ascenderá a 359 euros.

Desde la Consellería de Sanidade se explica que se seguirá prestando asistencia sanitaria pública a los 3.000 potenciales beneficiarios del programa mientras no lo tramiten, para lo cual se ha ampliado otros seis meses el plazo. En otras comunidades autónomas, sin embargo, la falta de asistencia sanitaria a inmigrantes ha desembocado en polémica. En Mallorca, por ejemplo, achacaron el fallecimiento de un joven senegalés por tuberculosis a la negativa de uno de sus hospitales a atenderlo, lo que costó la destitución del gerente del centro.