Los trabajadores con discapacidad cobran un salario bruto medio de 20.553 euros anuales, un 10% menos que el que perciben los demás (22.843), una diferencia que se reduce al 5,1% en términos netos, es decir, descontadas las deducciones fiscales y las cotizaciones a la Seguridad Social del trabajador.

Las diferencias entre trabajadores discapacitados y el resto son mayores para los hombres, cuyo salario es un 16,8% inferior en el caso de los discapacitados, que para las mujeres, con un 2% menos que sus homólogas sin discapacidad, según datos del Instituto Nacional de Estadística. El informe revela que entre los discapacitados la diferencia salarial por sexos es menor.