El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, permanece desde la tarde del miércoles ingresado en el Hospital Clínico Universitario de Santiago para ser tratado de un proceso infeccioso.

Fuentes del Arzobispado de Santiago aseguraron ayer que el ingreso de monseñor Barrio se ha producido para recibir un tratamiento antibiótico por vía intravenosa y garantizar su adecuada recuperación, pero subrayaron que se encuentra "bien y animado".

La previsión es que el arzobispo de Santiago permanezca "entre tres y cuatro semanas" apartado de su labor.