Una vez más, las titulaciones de la rama de Ciencias de la Salud vuelven a ser las más demandadas por los universitarios gallegos. Y como las plazas son limitadas y la competencia mucha, la consecuencia directa es que se necesita un expediente académico con una nota muy alta para conseguir una plaza en alguna de estas carreras. Las más exigentes son de nuevo Medicina y Odontología, en la Universidade de Santiago. Hay que tener más de doce puntos sobre un total de catorce. Por debajo de esta calificación, mejor pensar en otra titulación o en otra universidad.
La Comisión Interuniversitaria de Galicia (Ciug) difundió ayer las notas de corte provisionales que garantizan el acceso a la carrera solicitada como preferente. Son calificaciones eventuales porque las definitivas solo se conocerá cuando concluya el plazo de matriculación -que se inicia hoy-, pero los alumnos ya saben a qué atenerse.
El pasado curso, la nota mínima para entrar en Medicina fue de 11,780 puntos, pero para el próximo será un poco más elevada -más de doce puntos- porque las plazas ofertadas en esta titulación pasaron de 380 a 350. También se prevé un calificación superior a los doce puntos para acceder a Odontología.
La tercera carrera con el acceso más difícil es la de Fisioterapia, en A Coruña. Hay que tener más de once puntos, cuando el pasado años bastaba con superar los 10,366.
La Ciug señala otras siete titulaciones cuya matriculación está garantizada con una nota de corte superior a los 10 puntos. Son Fisioterapia, Traducción Español-Inglés e Ingeniería de la Energía en la Universidade de Vigo; Ingeniería Química y Enfermería en la de Santiago; y Enfermería y simultaneidad Derecho-Administración y Dirección de Empresas en la Universidade da Coruña.
Pero no solo hay que tener un buen expediente para acceder a la titulación preferente solicitada en la universidad. También sucede lo mismo en Formación Profesional, para la que se 34.574 personas solicitaron alguna de las 26.884 plazas ofertadas. La Consellería de Educación informó ayer de que tras la primera adjudicación, 24.972 alumnos obtuvieron la plaza que solicitaron como primera opción. Por tanto, casi 9.500 estudiantes se quedan fuera. Entre ellos se tendrán que repartir las 2.000 plazas que todavía no se han adjudicado y las que quedan vacantes por renuncias. Pero al final, serán unos 7.500 jóvenes los que no tendrán cabida este año en FP en Galicia porque la oferta de cursos resulta insuficiente para atender la alta demanda. El plazo para matricularse empezó ayer y concluye mañana. La segunda asignación de plazas se realizará el día 23.
