El presidente de la República de Irlanda, Michael D. Higgins, ratificó ayer con la firma protocolaria la nueva ley del aborto, que legaliza la interrupción de un embarazo cuando la vida de la madre corra peligro, lo que incluye la amenaza de suicidio. Después de estudiar el documento durante una semana, el presidente estampó su rúbrica sobre la primera ley del aborto que tiene este país.