Un equipo de científicos japoneses inició ayer el primer ensayo clínico del mundo con humanos usando células madre iPS, lo que abre una nueva y trascendental etapa de la medicina regenerativa. El equipo de científicos extraerá muestras de piel humana y a partir de ellas generará células madre iPS -que se crean mediante la reprogramación de células maduras y no con embriones- con capacidad de convertirse en tejido de retina, que después sería implantado en pacientes que sufren una degeneración macular asociada a la edad. Este problema es la principal causa de ceguera.

La prioridad de este primer ensayo sin embargo no es que los pacientes tratados recobren la vista sino probar que se trata de un proceso seguro en el que no se desarrollan tumores.