La Guardia Civil detuvo ayer al párroco de la localidad zaragozana de Borja, Florencio Garcés, por un supuesto delito económico -según informaban ayer medios digitales- en una operación que se desarrolló durante toda la mañana y finalizó con su detención a mediodía. El sacerdote era el encargado de custodiar el Santuario de Misericordia donde se encuentra el popular Ecce Homo, que fue trending topic en las redes sociales durante el verano de 2012 tras la polémica restauración que realizó de la obra una vecina del municipio, Cecilia Giménez, si bien se desconoce si el motivo de la detención está relacionado con esta obra.

Ante la detención y puesta a disposición judicial del párroco, el Obispado de Tarazona, a través de un comunicado de su vicario general Esteban Aranaz, expresó su "estupor y sorpresa" por esta noticia y su deseo de que se aclaren "cuanto antes las acusaciones que ante el juez se le imputan a Florencio Garcés".

El Obispado recordó la presunción de inocencia del párroco y manifestó su "confianza absoluta en el buen hacer de los jueces y el Ministerio fiscal y la disposición por parte de los responsables de este Obispado de Tarazona para colaborar con la justicia en el esclarecimiento de los hechos que se le imputen". Por último, señalaron que "el Obispo de Tarazona se reserva cautelarmente la aplicación de las normas canónicas correspondientes" ante esta detención.

La localidad de Borja se hizo famosa a nivel mundial durante el verano de 2012 debido a la polémica restauración del Ecce Homo. Un hecho que multiplicó las visitas que recibía el templo. Recibió visitas de todas partes del mundo, hasta 3.000 a la semana, por lo que se comenzó a cobrar un euro por entrada. Desde algunos medios como El Mundo señalaban ayer que la detención del sacerdote podría estar relacionada con la recaudación de las entradas para observar la pintura.

Cecilia Giménez, la autora de la polémica restauración, aseguró ayer que la detención del párroco le causa "estupor y disgusto" y añadió que, si hay que apoyarlo, "aquí está Borja" porque es una "buenísima persona". Giménez señaló que el pueblo "no sabe nada" de los motivos del arresto del párroco, una persona "buenísima que queremos mucho en Borja".