La decisión del Tribunal Supremo de la India de volver a declarar ilegales las relaciones homosexuales llevó ayer a cientos de personas a protestar en varias ciudades del país. La principales protestas se produjeron en Bombay, donde los manifestantes se echaron a las calles con pancartas en contra de la sentencia del Tribunal Supremo, y en Nueva Delhi.

"Han elegido ignorar los derechos humanos de mucha gente, por lo que estamos aquí para condenarlo y protestar contra ello. Y queremos decir que vamos a luchar en contra de esta ley draconiana hasta que sea retirada", dijo, durante la manifestación, la activista Jaya.

El Tribunal Superior de Nueva Delhi se opuso a esa ley hace cuatro años, al dictaminar que el artículo 377 del Código Penal violaba varios artículos de la Constitución por penalizar con hasta diez años de prisión actos sexuales consentidos entre adultos. "El Tribunal Supremo rectificará, de otro modo no creo que en un país democrático y plural como la India el Tribunal Supremo pueda legitimar algo como esto y continuar con su dignidad intacta", sentenció el activista gay y abogado Aditya Bandhopadhay.

Este letrado se declaró "optimista" ante el futuro de ese veredicto "vergonzoso".