El Tribunal Supremo ha obligado a un hombre a pagar una pensión compensatoria de 400 euros al mes a su exmujer por el tiempo que esta dedicó exclusivamente a su familia. Según consta en la sentencia del Supremo que resuelve el recurso de la mujer, esta se ocupó tras casarse durante 21 años de sus tres hijos en exclusiva, después trabajó en periodos cortos en tareas de limpieza y en geriátricos y después se divorció. Ahora está jubilada con una pensión y tiene una discapacidad reconocida del 15%.