El Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) estrenará la nueva área de Urgencias antes de que finalice este mes. Si todo va según lo previsto, la inauguración de las nuevas instalaciones -que con 2.400 metros cuadrados multiplicarán por cuatro la superficie actual- se producirá la próxima semana, casi con dos años de retraso según lo anunciado en su día por la Xunta, que en febrero de 2011 aseguraba que las nuevas Urgencias estarían listas para empezar a recibir pacientes a principios de 2012.

La apertura se realizará casi dos meses después de que finalizaran las obras y el hospital trabaja contra reloj para terminar de habilitar las instalaciones (colocar mobiliario, material, comprobar que cumple todos los requisitos...) y poder comenzar a atender a pacientes. A principios de febrero, cuando se terminaron las obras, la dirección del Chuac señaló que en ningún momento permanecerán abiertas las dos áreas de Urgencias. Pese a que el traslado de pacientes se realice durante varios días, cuando abra sus puertas la nueva zona, los enfermos que lleguen al hospital solo serán atendidos ya en esta área.

El pasado lunes, sanitarios del área de Urgencias visitaron las nuevas instalaciones y aseguran que "todavía faltan muchos flecos". "Queda por terminar de equipar el área de rayos y los quirófanos", señalaban ayer desde el sindicato O'Mega. El equipamiento y el material del área de Radiología llegó el martes al hospital.

El objetivo de la ampliación de Urgencias es terminar con los continuos problemas de saturación que viven la actuales instalaciones. Por ello, la nueva área está diseñada para agilizar la clasificación de los pacientes una vez lleguen a Urgencias y mejorar su atención cuando pasen a consulta o mientras aguardan a ser atendidos. La primera diferencia se apreciará al llegar ya que los sanitarios contarán con tres salas de triaje (en donde se examina al paciente para clasificarlo en función de su gravedad) mientras que hasta ahora solo había una. Las nuevas Urgencias también duplican el número de boxes en los que atender a los pacientes al pasar de los diez actuales a los 20 de las instalaciones que abrirán sus puertas en breve. Todos ellos además estarán dotados de un punto informático con acceso al historial médico del paciente.

Los enfermos más críticos contarán con cuatro boxes especiales y además habrá otros dos para pacientes que precisen ser aislados. La zona en la que los pacientes aguardarán para ser ingresados en planta también se amplía y permitirá contar con hasta 97 pacientes en observación. Para ello habrá 47 camas y una sala con 50 sillones.

Además los pacientes más leves tendrán un área de consultas leves, habrá una zona de Radiología, una sala de yeso, varios quirófanos y un área de duelo para los familiares de los pacientes. Toda una serie de servicios que ultiman los días para empezar a funcionar.