Entre un 20 y un 30% de los traumatismos craneoencefálicos pueden dejar secuelas neurológicas, aumentando el riesgo de padecer ictus, demencia, cefalea o epilepsia secundaria, según un comunicado de la Sociedad Española de Neurología. Los traumatismos, cuya principal causa son los accidentes de tráfico, aumentan en verano como resultado de lesiones acuáticas y de una mayor práctica del ciclismo, aseguran los expertos.