Un equipo internacional de investigadores, con la participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ha desvelado una nueva diana que podría aplicarse para la optimización y el diseño de nuevos fármacos contra el cáncer con menor toxicidad que los empleados actualmente en quimioterapia.

Los resultados de este trabajo aclaran que la clave de este hallazgo se encuentra en la unión de la tubulina, la proteína responsable de la segregación de los cromosomas durante la división celular, y tres nuevos agentes antitumorales (rhizoxin, maitansina y PM060184). Según este estudio, la unión bloquea la división celular de las células tumorales.