Los telespectadores alemanes trataban ayer de comprender la sorprendente decisión de Andreas Kümmert, el joven cantante de 28 años que se hizo con la mayoría de los votos en el concurso para elegir al representante del país en el Festival de Eurovisión y que, inesperadamente, anunció que no quiere ir a Viena.

Kümmert, cuya voz ha sido comparada con la de Joe Cocker, se hizo ya hace dos años con el favor del público, que le convirtió en vencedor del concurso The voice of Germany.

El jueves, en la final para la elección del represente alemán en Eurovisión, retransmitida en directo por la televisión pública, volvió a ganar con el tema Heart of Stone, pero, de manera inesperada, decidió rechazar la propuesta.

"No estoy realmente en condiciones de aceptarlo", señaló el joven antes de pedir perdón y escuchar los abucheos del público con ojos serios tras sus características gafas de miope.