Si hasta ahora el Ejecutivo autonómico negociaba con las entidades bancarias para lograr que no se llevara a cabo el desahucio de familias que tenían problemas con el pago de su hipoteca, la Xunta da "un paso más", como explicó ayer la conselleira de Traballo, Beatriz Mato, e "inmediatamente" pondrá en marcha un programa en que la Administración autonómica también ejercerá de "mediador", pero frente a otro colectivo, los propietarios de pisos. "Queremos acercarnos también a las familias que tienen ahora un problema con las rentas de alquiler y por tanto también haremos de mediadores ante estas familias con los propietarios privados para intentar llegar a una solución", explicó.
El programa Reconduce, recordó la conselleira, se saldó hasta ahora con ochenta victorias, el número de familias que consiguieron conservar su domicilio gracias a la intervención de la Xunta, que también extenderá la red de oficinas para "dar respuesta" a estas familias a las cuatro provincias gallegas.
