El sindicato CIG-Saúde denunció ayer que el cierre de camas puesto en marcha por la Consellería de Sanidade "ya ha provocado el colapso" del servicio de Urgencias del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac). La organización sindical asegura que, durante el pasado fin de semana, la saturación del servicio fue "continua" y que a primera hora del pasado lunes había "42 personas a la espera de cama para ingresar" y ayer la cifra era de treinta. Desde el Chuac reconocen que la afluencia a Urgencias "es superior a la media habitual" durante los últimos meses, pero aseguran que el 100% de camas del hospital están operativas ya que el cierre comienza el próximo 1 de julio.

Desde la CIG sostienen que, este verano, se cerrarán unas 200 camas hospitalarias en el área sanitaria coruñesa y aseguran que ya hay 25 inoperativas en el Hospital Abente y Lago. Para el sindicato, este cierre es el que ha provocado la "acumulación de pacientes" en el servicio de Urgencias desde el pasado sábado. "El lunes a las ocho de la mañana había más de 160 pacientes en Urgencias, de los que 42 estaban a la espera de camas", indican.

"Llevan, en algún caso, más de 48 y hasta 72 horas", enfatizan desde el sindicato, donde subrayan que los pacientes "tienen derecho no solo a recibir asistencia sanitaria, sino a recibirla con unas mínimas condiciones de dignidad". Además, el sindicato recuerda que la Xunta garantizó que habilitaría camas cerradas si eran necesarias para atender a los pacientes.

Desde el hospital, aunque en ningún momento hablan de saturación, reconocen que el número de personas atendidas en Urgencias ha aumentado en los últimos meses -el lunes se atendió a 344 personas cuando la media es 304-, lo que se traduce en más personas en la sala de observación del servicio. "Allí están los pacientes pendientes de ser trasladados a los distintos servicios de hospitalización, los propios pacientes de Urgencias que esperan para completar tratamientos o para ser observados de forma continuada, a la espera de la toma de decisiones de los facultativos", indican mientras recuerdan que no se ha tenido que reprogramar ninguna intervención quirúrgica.