El secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, advirtió ayer a las comunidades de la forma en la que algunas están devolviendo la asistencia sanitaria a los inmigrantes irregulares porque puede tener "consecuencias catastróficas" como multas diarias millonarias por parte de la UE. Moreno se expresó así en la Comisión de Sanidad del Congreso, en donde expuso los presupuestos de su Secretaría para el próximo año que ascienden a 317,21 millones de euros, un 2,05% más que en 2014.

Moreno explicó que si las comunidades devuelven la tarjeta sanitaria a los irregulares, también tendrían que atender a los ciudadanos europeos que acudan a esa autonomía tras tres meses de residencia y que no paguen el seguro en su país de origen. "Imagínate tratar a los pacientes europeos y que en lugar de asumir los costes el país de origen lo haga la comunidad que le toque", señaló para aclarar que se volvería a la situación previa de la reforma sanitaria en la que España estuvo a punto de ser condenada por el Tribunal de Justicia Europeo y eso implicaría pagar multas millonarias cada día.