Incansables, eficientes, ligeras y decididas, quince ratas gigantes africanas comienzan con la primera luz del día su entrenamiento para detectar explosivos en la provincia de Siem Reap, en Camboya, que sigue plagada de minas. La ONG belga Apopo envió en junio desde Tanzania, a estos animales que pasean por la hierba y al detectar una mina se paran y escarban en la tierra para marcar donde se encuentra. El objetivo localizar los artefactos y salvar vidas.