El Mobile World Congress cerró ayer con la cifra récord de más 100.000 asistentes en su undécima edición en Barcelona, que fue "la mejor y más grande de la historia", según la entidad organizadora GSMA, pese a los problemas de movilidad causados por una huelga del metro de la ciudad.

El Congreso, que comenzó el pasado lunes en el recinto ferial de Gran Vía de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), logró así aumentar en más de un 6% la cifra de visitantes con respecto a 2015 y superar las previsiones iniciales para este año, en el que GSMA esperaba llegar a los 95.000 asistentes. La feria reunió, asimismo, a unas 2.200 empresas de todo el mundo y a 3.600 medios de comunicación y analistas.

"El Mobile ha batido un récord significativo en esta edición de 2016, al superar los 100.000 visitantes por primera vez", destacó el consejero delegado de GSMA, John Hoffman, quien aseguró que todos los asistentes han podido disfrutar de un evento "de lo más estimulante, con conferenciantes de primer nivel y con presentaciones de productos que marcarán las tendencias en la industria de ahora en adelante".

Barcelona ha recibido a más congresistas que nunca, precisamente en una semana en la que han ido a la huelga tanto los trabajadores del metro, con paros de 24 horas los días 22 y 24 de febrero, como los del autobús, con paros parciales el 23 y el 25.

Hoffman no se refirió ayer a la huelga del metro, que es la que más problemas de movilidad ha causado a los asistentes, aunque el lunes no escondió su malestar por esta situación y, en protesta, se ausentó de la inauguración oficial de la feria, a la que asistieron el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y el ministro de Industria en funciones, José Manuel Soria.