La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció ayer que lanzará una campaña de vacunación masiva contra la fiebre amarilla en la frontera entre Angola y República Democrática del Congo (RDC) para intentar frenar el avance del brote que ha matado al menos a 420 personas en los últimos meses.

La campaña se ha puesto en marcha ante la multiplicación de nuevos casos y el peligro de contagio a otros países y ya se han transportado más de 15 millones de dosis a la zona de actuación, aunque las autoridades locales tienen problemas logísticos para la vacunación.