Es una pregunta que me han hecho varias veces. Y la respuesta es más complicada de lo que parece? porque es útil para muchas cosas. Casi nadie duda ya de los beneficios que para la salud tiene una alimentación sana y equilibrada y la soja forma parte de esta corriente saludable que busca prevenir la aparición de enfermedades y cuidar su estilo de vida sin renunciar a nada. Se ha ido introduciendo poco a poco en nuestra dieta habitual por su aporte nutricional, pues contiene proteínas vegetales, hidratos de carbono complejos, vitaminas y minerales? y la encuentras en todas las formas que desees, hasta para tu piel.

Botánicamente es una legumbre (leguminosa) de la familia de las papilonáceas (como el guisante) y su nombre científico es Glycine max. Es una planta de tamaño medio con flores blancas y frutos que contienen semillas de colores diferentes en función de la especie de la que se trate (amarillas, negras, verdes, etc...) Su origen es asiático y se introdujo en Europa en el siglo XVIII; actualmente se cultiva en diferentes zonas del mundo porque la demanda ha aumentado debido al incremento de su consumo y sigue siendo un alimento básico en China.

De su composición química podemos destacar:

-Proteínas, cada 100 gr aportan unos 35 gramos de proteína vegetal de alta calidad. El doble que la carne y cuatro veces más que los huevos, por ejemplo.

-Ácidos grasos. Presenta un bajo contenido en grasas saturadas y se considera que ayuda a controlar el colesterol y el exceso de grasas animales.

-Isoflavonas. Con un efecto estrogénico importante para la mujer, en la arteriosclerosis y como antioxidante.

-Hidratos de carbono complejos. Importantes para mantener el índice glucémico y saciar el apetito.

-Aminoácidos esenciales. Contiene ocho de los nueve fundamentales para fabricar las proteínas de los músculos (prolina, serina, tirosina, treonina, triptófano, valina, leucina y lisina); solo es escaso en metionina.

-Vitaminas. A, E, C y grupo B.

-Minerales. Fósforo, potasio, calcio, magnesio, zinc, hierro y cobre.

Importante destacar la presencia de lecitina, que es un grupo de sustancias grasas (colina, glicerol, ácidos grasos y fosfolípidos) que proporciona elasticidad a las membranas celulares y las protege de los radicales libres nocivos. Es muy abundante en la soja y se considera beneficiosa para el corazón, la circulación, el hígado, etc...

Puede ser una buena alternativa al consumo de carne en quienes siguen dietas vegetarianas y deben ingerir proteínas para mantener el equilibro nutricional. Una gran ventaja es que resulta apta para intolerantes a la lactosa y proteínas de vaca que deben eliminar la leche y sus derivados de su alimentación. También se considera indicada para las personas mayores que consumen pocas proteínas.

Una ventaja importante es que contribuye a prevenir la descalcificación de los huesos por su contenido en minerales (calcio y fósforo especialmente) y la presencia de una isoflavona que interviene en el proceso. Muy interesante en mujeres menopáusicas para mantener su esqueleto en perfecto estado. Ya son muchos los médicos que la pautan en forma de comprimidos sola o combinada con otros compuestos que potencian su actividad para mejorar los síntomas asociados a esta etapa de la mujer (sofocos, sequedad, etc.). Consulta su consumo y no te automediques.

En los puntos de venta encontramos muchos productos distintos en los que la soja es el componente fundamental y, normalmente, único. Destacaríamos: leche, miso, aceite, harina, bebida (natural, con chocolate, vainilla, etc...), brotes, tofu, salsa, etc. que puedes utilizar para preparar diferentes recetas. Puedes añadir los brotes a tu ensalada habitual, cambiar la leche de vaca por la de soja para tu desayuno, añadir al pescado a la plancha la salsa de soja, etc...

Te proponemos que prepares un bizcocho con un yogur de soja. Utiliza el envase para medir y añade dos vasos de azúcar, tres de harina, medio de anís, medio de aceite, un sobre de levadura y tres huevos. Mézclalo todo con la batidora y ponlo en un molde. Mételo en el horno precalentado unos 45 minutos a 180º.

A pesar de los beneficios que se le atribuyen, existen expertos que señalan que también tiene efectos negativos en la salud, por lo que no se debe consumir alocadamente sin control. Consulta a tu médico si perteneces al grupo al que puede beneficiar su consumo en forma de cápsulas, por ejemplo, cuyo contenido fundamental es la soja. Elige la que no sea transgénica, aunque su precio sea más elevado.