2017 estará marcado en la televisión por el duelo de las televisiones por cable. HBO con Game of Thrones y Westworld tratará de mantener su dominio frente a Netflix, que apuesta fuerte con sus éxitos del momento, Stranger things y The Crown, y contraataca con nuevos títulos de Marvel. Una batalla por la audiencia que se extiende cada vez a más países debido a la expansión internacional de estas dos plataformas, inmersas en una trepidante carrera de presentación de nuevos productos, de la que se benefician los espectadores.

HBO apostó fuerte por Westworld como sustituta del fenómeno de Juego de Tronos, a la que le quedan solo dos temporadas, pero además cuenta con nuevas series como Divorce (con Sarah Jessica Parker) o The Young Pope (dirigida por Paolo Sorrentino y protagonizada por Jude Law).

Juego de Tronos regresará con la séptima temporada y el mismo secretismo que cada año. Los avances a cuentagotas revelan que gran parte de la ficción girará en torno a Sansa (Sophie Turner), Jon Nieve (Kit Harington) y Arya (Maisie Williams). En cuanto a Divorce, buscará asentarse en su segunda temporada, y The Young Pope llegará entre gran expectación tras el éxito cosechado en su presentación en el Festival de Venecia. Otra nueva serie de HBO que es igualmente muy esperada es The Deuce (HBO), sobre los inicios de la legalización e industria del porno en los años setenta en Nueva York, con James Franco, Maggie Gyllenhaal y Emily Meade.