El papa Francisco reclamó ayer a las instituciones una "atención concreta" hacia "la vida y la maternidad", en una jornada en la que en Italia y en otros países del mundo se conmemoró el Día de la Madre.

"El futuro de nuestras sociedades requiere por parte de todos, especialmente de las instituciones, una atención concreta a la vida y a la maternidad", señaló desde el Palacio Apostólico tras el rezo del Regina Coeli, que sustituye al Ángelus en tiempo pascual.

Por otro lado, el Pontífice argentino instó al diálogo y a la reconciliación para acabar con las guerras en el mundo, "en particular en Oriente Medio", donde muchas personas sufren "trágicas violencias" por cuestiones de fe o étnicas.

"Confío en María, Reina de la Paz, la suerte de las poblaciones afligidas por las guerras y de los conflictos, en particular en Oriente Medio", dijo el papa Francisco, quien recordó que, en la actualidad, "muchas personas inocentes sufren duramente".