El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, consideró ayer "imposible predecir" las agresiones a sanitarios gallegos, aunque insistió en que su departamento está tomando medidas. Entre ellas, citó la utilización de aplicaciones de llamada rápida para prestar ayuda en casos necesarios.

A preguntas de los periodistas después de que un vecino de Fene haya sido condenado a ocho meses de prisión como autor de una agresión a un médico del centro de salud de esta misma localidad, el conselleiro expresó el rechazo "a cualquier tipo de violencia". Sobre estas agresiones, dijo que la mayoría suelen ser "verbales, no físicas", pero insistió en que rechaza "cualquier tipo de violencia". Sobre sus autores, recalcó que son "personas muy concretas de determinados centros de salud".

Respecto a las agresiones, señaló que suponen una cantidad "pequeña". "Pero el objetivo es que sea cero siempre", recalcó el conselleiro de Sanidade.