Un episodio violento protagonizado por un alumno de Derecho de la Universidade de Vigo del que fue víctima una profesora y que acabó en una sala de vistas. El acusado aceptó ayer 6 meses de cárcel por insultar e intentar agredir a la docente en su despacho, a donde había acudido para revisar un examen en el que tenía un 0,5. El estudiante causó destrozos en la estancia, motivo por el que debe indemnizar con 130 euros a la Universidade de Vigo y con 175 a la perjudicada.

La vista de conformidad se celebró en el Juzgado de lo Penal 2. El acusado, G.F.B.G., asumió la autoría de un delito de atentado y una falta de daños. La pena de prisión se le suspende durante un período de dos años condicionado a que no vuelva a delinquir en ese tiempo.

Ocurrió, relata el fiscal, la mañana del 14 de enero de 2015, cuando el condenado acudió al despacho de la profesora titular del departamento de Economía Aplicada a revisar un examen de Política Monetaria. En un momento dado, se alteró y gritó a la docente, profiriendo amenazas e insultos como "sinvergüenza". La mujer, ante esa actitud, le pidió que abandonara la estancia, a lo que él se negó, por lo que salió a pedir ayuda.

Mientras permaneció solo en el despacho, el acusado, con antecedentes penales, dañó una impresora y objetos personales de la víctima. Alertada por el ruido, la profesora regresó acompañada de otro docente. El acusado se abalanzó hacia ella con intención de agredirla, sin lograrlo. Aunque prosiguió con su conducta agresiva, acabó marchándose al acudir allí más personas. La denuncia policial interpuesta por la docente motivó que el caso acabase en la vía judicial.

"No se trata de un alumno joven, y solo lo había visto una vez porque estaba en un plan a extinguir y ya no había clases, solo exámenes. Intentó tirarme la pantalla del ordenador pero un compañero se interpuso. Fue muy violento y desagradable. Puse la denuncia porque me daba miedo encontrármelo y durante mucho tiempo me cerraba en el despacho con llave. No he vuelto a hacer una revisión si no está presente otro profesor. Jamás me ha pasado algo igual. Siempre me he llevado bien con los alumnos y me han elegido madrina de varias promociones", relata la víctima, con más de dos décadas de experiencia . Su departamento y la junta de facultad la respaldaron de forma unánime pero la sanción impuesta por el Rectorado, fue expulsar al alumno durante cuatro meses.