Profesores de Historia de 2º de Bachillerato piden mantener sin cambios el examen de selectividad de este curso de cara a las pruebas ABAU (Avaliación de Bacharelato para o Acceso á Universidade). Rechazan el nuevo modelo de examen del grupo de trabajo de la Comisión Interuniversitaria de Galicia (CIUG)al considerar que amplía considerablemente la materia de la que se debe examinar el alumnado. "Con el nuevo modelo planteado para el próximo curso la exigencia para los estudiantes sería inabarcable, desde la Prehistoria hasta el siglo XX", expresó uno de los portavoces de los profesores de Historia reunidos ayer en la Facultad de Ciencias Políticas de Santiago para buscar una solución para la selectividad del próximo mes de junio.

La prueba de Historia de España es obligatoria en selectividad. Consideran los profesores reunidos ayer que si se mete tanta materia en el examen, alumnado que necesita una buena nota en las ABAU para acceder a la carrera que desea podría salir perjudicado. "Es examen obligatorio, así que fundamental para estudiantes que pelean por carreras como Medicina, por poner un ejemplo", explican los docentes.

Defienden que el examen de este año (2018) cumplía con las exigencias de la Lomce, que obliga a examinar de un 70% de los estándares. "Consideramos que la prueba de este curso, en la que entraron los siglos XVIII, XIX y XX, se ajusta a lo que pide la nueva ley, por eso no vemos la necesidad de cambiar el examen", señaló el portavoz. Los más de 20 docentes reunidos ayer acordaron "buscar apoyos en todos los centros de Galicia para presentar un escrito ante la CIUG". El nuevo modelo obligaría al alumnado a controlar un extenso temario para sacar la máxima nota (hasta 20 temas y 70 definiciones).

"El examen de este año constaba de tres partes. La primera, que vale 2 puntos, son cuatro conceptos para definir sobre 49 términos de los siglos XVIII, XIX y XX. La segunda es un desarrollo técnico y vale tres puntos: la opción A con el siglo XIX o XVIII y la B con los siglos XVIII o XX. Y el tercer ejercicio es una composición histórica a partir de tres documentos: la opción A del siglo XIX y la B del XX. Vale cinco puntos", indican.

Antecedentes. Historia de España era optativa en selectividad hasta el curso 2016/2017. El examen consistía en elaborar un tema partiendo de textos históricos: había una opción que hacía alusión al siglo XIX y otra al siglo XX.

Cambios con la Lomce. Historia de España es obligatoria ahora en la selectividad, el currículum es más extenso (abarcando más etapas históricas, desde la Prehistoria) y debe estructurarse en varios tipos distintos de preguntas.

¿Qué entra? Con la adaptación de la normativa, el alumnado de 2º de Bachillerato ya tenía que dar toda esa materia en un solo curso, sin embargo solo entraba en el examen de selectivo el siglo XIX y el XX. En el examen de este año (2018) se incluyó el siglo XVIII. Sin embargo para la prueba de junio el tema se podría complicar si cae en el examen materia desde el Neolítico hasta el siglo XX.

Dudas del profesorado. Los cambios sobre lo que hay que examinar y lo que no provocan dudas entre el propio profesorado. Los reunidos ayer en Santiago aseguran que examinando de los siglos XVIII, XIX y XX se completaría el 70% de los estándares que fija la Lomce.

Nuevo modelo. La prueba se dividiría en tres partes. En la primera, con un peso de dos puntos, habría que definir 4 de entre 70 términos de toda la Historia de España. La segunda parte valdría tres puntos y supondría desarrollar en una hoja un tema entre tres ofertados, que abarcaría desde Prehistoria e Historia Antigua a Medieval, Moderna y Siglo XVIII. Para obtener la máxima puntuación en este apartado el alumnado debe controlar bien 9 temas de toda esta etapa, incluido el siglo XVIII. El tercer ejercicio valdría cinco puntos: en la opción A habría que desarrollar un tema sobre el siglo XIX y en la opción B del siglo XX.

Nota. Para aprobar bastaría con saberse bien doce temas, pero para sobresaliente hay que llegar a la veintena y las 70 definiciones.