Dantés, el cuerpo. Dicen que el nudismo es una filosofía de vida, lo que convertiría a Leonardo Dantés en filósofo. Digo porque Dantés, autor del célebre No cambié que trajo a la hoy llamada Yurena a nuestras vidas, acaba de regresar a la esfera musical, audiovisual y pública con una canción -de su propia composición- y un videoclip -protagonizado por él mismo- a favor del cuerpo -propio- desnudo. Y porque Dantés fue carne y verbo del frikismo en estas tierras, pionero friki, cuando estaba todo por inventar y todo era más casero, más precario, que ahora es muy fácil. Y porque inventó el celebérrimo baile del pañuelo que, analicen, tiene su aquél, su aporte filosófico, entre lo antropológico y lo futurista, lo visionario. Y porque tuvo los reaños de retirarse del frikismo a tiempo, a su pueblo extremeño, y reinventarse quitándole la tilde a su apellido; no me digan que eso no es filosofía pura, clásica. Y ahora le canta a "el cuerpo joven, el cuerpo maduro, el cuerpo claro, el cuerpo oscuro" como en su día al "miembro viril y sus nombres mil" podrían herir sensibilidades. Soy una persona.

Descubrimiento WhatsApp. Nunca es tarde. Jesulín, que para algunas cosas -como vestir estampados de Versace, cantar sin saber cantar coleccionar sostenes o criar leones con biberón- fue precoz, acaba de descubrir, a los 45, WhatsApp. Se ve que anda deslumbrado con los vídeos, las fotos, los memes, y los emoticonos, desatado, un poco sobrepasado. Que todavía no controla bien las claves, los códigos, y envía en masa y sin ton ni son. Y no, que eso es un metalenguaje, como el capote, o las exclusivas, y tiene su jerga y sus lecturas, constituye casi un arte menor. Como el polígrafo. Se ve que Jesús anda especialmente fascinado con algunos virales en concreto. Y que sus destinatarios son los reporteros del corazón. Pues hay que ir con cuidado, que los smartphones los carga el diablo. O un hacker cualquiera. Y veremos cuando descubra los grupos...

La edad. La edad es un concepto subjetivo, relativo, abierto, chicle. Edades hay muchas. Una cosa es la edad física y otra la edad mental. Lo sabemos porque Mariló -cuánto se la echa en falta- se lo soltó así, a bocajarro, a la Obregón, le preguntó por su edad mental por no hacerlo por la otra, que era más secreta que su título de doctora en Biología. La edad biológica y la edad cronológica tampoco son lo mismo, ni tienen por qué coincidir con la esotérica. Aramís tiene 698 años aunque su carné diga 68. Isabel es otra cosa, caso aparte, Isabel no tiene de eso, edad. Luego está Julio Ruz, 36. Y ya. Nada que añadir.

Limpio. Algo tiene Albert Rivera con las famosas. Ellas con él, mejor dicho. Primero fue Leticia Sabater la que se le ofreció toda, en cuerpo y alma, le ofertó el intelecto y el talento, estaba dispuesta a entregarse hasta en estado original, cuando se operó y le propuso el reestreno. Y ahora es Tamara, a decir de Pilar Eyre, la que cayó prendada. Se ve que el hombre fue invitado al selecto comedor de mamá Preysler y su novio el Nobel. Tamara dice que es todo broma, y lo dice arrastrando las eses, o sea, muy en serio, pero por si acaso ya cuenta con el beneplácito ideológico de él y el estético de ella. Mami ve a Rivera "limpio, honrado y con mucho sentido del humor". Parejas así ya se han visto. Limpias, honradas y con sentido del humor, me refiero.

Corazón líquido. No puede ser. Se da una la vuelta un momento de nada, se despista, anda ausente un día, o dos, y, cuando se quiere dar cuenta, el mundo es otro. Chabelita y Omar ya no son pareja, con lo consolidado que parecía ese amor y se ve que era más falso que el comunicado del novio famosísimo negando a Makoke, que en vez de las colinas Hollywood venía datado en el desierto de Almería. A Míriam, la princesa azteca, le ha dado tiempo a operarse más cosas todavía. O las mismas más veces. Y, hablando de quirófanos, Erik Putzbach, que siempre les ha tenido mucha afición, y eso que apenas tiene la misma edad que Julio Ruz más o menos, ha enviudado del señor millonario que le sacaba cincuenta o así y se ha quedado, se ve, sin marido, sin papeles (de matrimonio) y es posible que sin herencia. Los tiempos líquidos han llegado hasta el mundo del cuore. Han tocado los cimientos de lo más sólido. Si hasta Sibi Montes, la hermana de Lourdes, la mujer de Fran, tan formales la dos, tan de buen colegio de pago, se ha separado... No les digo más.