La segunda ración de los asaltos de La Voz de Antena 3 ya está servida y el gallego Andrés Balado se convirtió en uno de los protagonistas de esta nueva entrega del talent show de Atresmedia que busca al mejor cantante de España entre el más de medio centenar de intérpretes que pasaron las audiciones a ciegas.

Su interpretación de la canción Heaven de Bryan Adams no solo convenció a Paulina Rubio -su guía espiritual y formativa en La Voz- sino que arrancó las lágrimas de buena parte de los coaches que acudieron sorprendidos a la actuación del padre de familia que entró en el programa cantando el Purple Rain de Prince con una voz desgarrada.

Si las lágrimas de Antonio José y Pablo López, ayudante de la mexicana en esta nueva fase de La Voz, dejaron claro que algo especial había pasado sobre el escenario del programa de televisión, los halagos de David Bustamante después de cantar no se quedaron atrás: "Si Estados Unidos tiene a Bruce Springsteen, y nosotros te tenemos a ti como Boss", llegó a decirle el cántabro.

Antonio Orozco, incluso, llegó a llamarse "estúpido" por no haberse dado la vuelta en las audiciones a ciegas y alabó la actitud de este padre de familia natural de la localidad coruñesa de Cariño. La coruñesa Miriam Rodríguez, cantante de Pontedeume que colabora como asesora de Pablo López en esta edición de La Voz, también dedicó palabras de admiración a su paisano Andrés Balado.

IRIA CRUZ, FUERA DE 'LA VOZ'

La de Andrés Balado no fue la única actuación de un concursante gallego este martes en la última entrega de La Voz. Iria Cruz, la joven que se trasladó a Galicia de pequeña junto a sus padres convenció con su actuación en los asaltos del equipo de Antonio Orozco, pero no logró avanzar a la siguiente fase.

De hecho, el propio Orozco no pudo explicarle las razones que le habían llevado a decidirse por Lorena Fernández y Teresa Ferrer después de calificar de técnicamente perfecta la interpretación de Impossible de James Arthur.

CUATRO GALLEGOS

Cuatro fueron los gallegos que superaron las audiciones a ciegas de La Voz y pasaron a formar parte de los equipos de los 'coaches' del programa y tres de ellos continúan en el programa. Una vez formados los equipos de Antonio Orozco, Pablo López, Luis Fonsi y Paulina Rubio, ahora los aspirantes se enfrentan entre sí en la nueva fase del talent show: los asaltos.

Son 60 candidatos los han entrado en La Voz después de enfrentarse y superar la fase en la que los coaches seleccionan a los concursantes del programa musical.

El equipo de Paulina Rubio fue el primero en sumar contar con un concursante gallego en sus filas. Andrés Balado, informático de Cariño que siempre va acompañado de un canto rodado como amuleto y que se presentó a La Voz para que sus hijas lo viesen actuar en un gran escenario. Acompañado siempre con su guitarra, este gallego conquistó el corazón de la mexicana con una versión del Purple Rain de Prince y ahora continúa adelante tras superar la criba en los primeros asaltos y conseguir que su coach le seleccionase entre sus dos apuestas para continuar en el programa de un total de cinco integrantes de su equipo que compitieron en la primera entrega de los asaltos.

Ángel Mosquera y Leonardo Mera fueron de los últimos concursantes gallegos en incorporarse a La Voz. Lo hicieron en el equipo de Luis Fonsi cantando una particular versión acústica de Toxic de Britney Spears. Su particular sintonía y energía conquistó al autor de Despacito que, con ellos dos, completaba su equipo. Ángel y Leonardo se conocieron en una cena entre amigos. Descubrieron que ambos compartían su afición por la música y desde entonces tocan juntos. Su pasión es tal que incluso cuando uno se fue a vivir a Irlanda se enviaban canciones vía correo electrónico para seguir cantando juntos. Leonardo toca la guitarra, Ángel pone la voz. Ambos continúan también en el programa tras el primer asalto gracias a que, pese a quedar al margen de la selección de Luis Fonsi, pasan ahora al equipo de Paulina Rubio, quien hizo uso de la opción de robar concursantes que incorpora el talent musical en esta edición.

Iria Cruz, la cuarta aspirante de Galicia entre los concursantes seleccionados para la presente edición de La Voz, es la única participante gallega que se ha quedado en el camino.