La Audiencia de Madrid acordó que la instrucción del supuesto suicidio asistido de María José Carrasco, enferma terminal que se quitó la vida con la ayuda de su marido, Ángel Hernández, continúe en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer que lo investiga, dado que aún faltan pruebas para concluir que no sea un caso de violencia machista.

Según informó el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, la sala entiende que "en esta fase procesal no se dan las circunstancias para determinar fehacientemente si se trata de un acto de violencia contra una mujer en el ámbito de la pareja, como determina la Ley integral de Violencia sobre la Mujer". Los magistrados argumentan que en el procedimiento aún faltan elementos probatorios pendientes de practicar que no permiten afirmar en que deba excluirse la competencia del Juzgado de Violencia Sobre la Mujer.

Con esta resolución, que es firme y contra la que no cabe ningún tipo de recurso, la sección 27 de la Audiencia de Madrid resuelve la cuestión de competencia que se originó después de que el Juzgado de instrucción número 25 de Madrid se inhibiera en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer y de que este rechazara asumir la investigación de los citados hechos, ocurridos el pasado 3 de abril.