Las descargas ilegales de música en internet han caído en los últimos cuatro años 13,2 puntos, ya que en este periodo las personas que llevan a cabo esta actividad bajaron del 18,3% al 5,1%, según la Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales en España 2018-2019. Una caída que también se nota a la hora de descargar ilegalmente videos: se pasó del 16,1% al 3,7 %. Para el ministro de Cultura, José Guirao, este descenso es el resultado de varios factores, como la "concienciación" de la población, el mayor control de páginas webs piratas por parte de la Administración o la mayor presencia de plataformas legales de consumo cultural.

Guirao, sin embargo, asegura que "no hay que bajar la guardia" y, refiriéndose al caso de las descargas ilegales de música, expresó que hay que "mejorar ese 5,1%" para que en los "próximos años sea cero".

El estudio también revela, por otra parte, que el consumo cultural en España ha crecido en los últimos cuatro años en casi todas las actividades, salvo la zarzuela y el circo con ligeras caídas. Escuchar música, leer e ir al cine siguen siendo las actividades culturales más frecuentes en España, con tasas anuales del 87,2%, el 65,8% y el 57,8% respectivamente. El consumo de televisión cae aunque mantiene un 90,9%. En cualquier caso, se tratan de cifras que muestran una recuperación respecto al año 2008, cuando comenzó la crisis „y redujo al mínimo el consumo cultural„ que ya se apuntaba en 2014.

El informe de Cultura revela que más de la mitad de la población española (el 52,2%) dispone de suscripciones a plataformas digitales de contenidos culturales. El libro por su parte resiste al empuje del digital, siendo el papel el soporte favorito para un 61,9% de los lectores.

Por géneros, la mujer es habitualmente mayor consumidora de actividades culturales, en especial en el caso de la lectura.