Valeria Quer precisó ayer atención médica para soportar la jornada. La dureza de los detalles con la que los testigos se refirieron a la muerte de Diana afectó a su hermana desde el comienzo. Tras abrazar a su padre no pudo seguir en su totalidad la reconstrucción de los hechos, abandonó la sala en varias ocasiones y tuvo que ser trasladada del edificio judicial en ambulancia.

La familia Quer convocó hoy a las 12.00 horas una concentración en la praza do Obradoiro de Santiago para guardar un minuto de silencio por Diana y todas las jóvenes asesinadas. También muy afectado por la dureza de los testimonios en la quinta jornada del juicio, Juan Carlos Quer apuntó que la "realidad no se puede tapar" y que "día tras día, este individuo está más cerca de pagar como debe lo que ha hecho con una niña indefensa, que podría haber sido su propia hija". Sostiene que no hay atenuantes porque el Chicle "nunca ha tenido la intención de atenuar el dolor de la familia".