Un estudio ha confirmado la relación entre realizar actividades de bricolaje y el riesgo de padecer cáncer de pulmón. Investigadores de la Universidade de Santiago, entre otras instituciones, han participado en este trabajo, publicado en la revista Environmental Research. En la investigación han participado un total de 14 hospitales de distintas comunidades y uno de Portugal, aunque el mayor número de participantes es gallego.

Los resultados muestran que las personas que practicaron actividades de bricolaje durante diez años o más tienen el doble de riesgo de padecer cáncer de pulmón que aquellos que no las realizaron. La posibilidad de tenerlo depende también de la dedicación al trabajo, pues a partir de las siete horas semanales el riesgo se multiplica por cuatro. Los autores aseguran que aunque lo ideal para prevenir este tumor es no fumar aconsejan también hacer tareas de bricolaje en zonas ventiladas y con protección.