La epidemia de coronavirus se está ralentizando notablemente en Corea del Sur y China. En Corea del Sur el número de contagiados diarios ha ido cayendo en los últimos cuatro días en el principal foco del virus, la ciudad de Daegu, en el sureste del país, donde ayer se registraron 92 nuevos casos. Es la primera vez desde que comenzó a expandirse la epidemia por el país, que el principal brote comenzó a ralentizarse en aparente respuesta a las medidas de choque aplicadas por las autoridades para reforzar la prevención y mitigar la saturación hospitalaria.

También las autoridades sanitarias chinas informaron ayer de un nuevo mínimo de nuevos positivos por el coronavirus. Según los últimos datos oficiales, los fallecidos en China suman en total 3.136, mientras que el número de infectados detectados hasta ahora alcanza las 80.754 personas.

Por otro lado, el coronavirus llevó a las autoridades iraníes a cancelar el discurso del líder supremo, Alí Jameneí, con motivo del año nuevo persa en Irán, donde la enfermedad había causado hasta ayer la muerte de 291 personas. El Ministerio de Salud iraní informó de que se confirmaron desde la víspera 881 nuevos contagios, de los que 54 fallecieron, lo que eleva el cómputo global de infectados a 8.042. De ellos, 2.731 se recuperaron de la enfermedad, que tiene en la actualidad su principal foco en la provincia de Teherán, con más de dos millares de personas contagiadas.

Para tratar de contener la epidemia, Irán canceló todo tipo de eventos públicos, tanto culturales como deportivos y religiosos, y ahora le ha llegado el turno a un acto del líder. Jameneí tenía previsto como cada año ofrecer un discurso en el mausoleo del imán Reza en la ciudad santa de Mashad con motivo del año nuevo persa), el próximo día 20. El líder tampoco viajará a Mashad siguiendo "las recomendaciones de los profesionales sanitarios de evitar reuniones y viajes para prevenir la propagación del coronavirus".