Los ayuntamientos podrán usar su superávit para financiar medidas de desescalada y reconstrucción en las próximas semanas y meses. Así lo anunció ayer el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y alcalde de Vigo, Abel Caballero, tras la videoconferencia que la Junta de Gobierno de la entidad mantuvo con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Según Caballero, el Gobierno permitirá que los municipios empleen los 3.830 millones de euros de su superávit de 2019, así como más de 7.000 millones de remanentes de tesorería para costear el proceso de desescalada y reconstrucción social y económica. No obstante, falta por concretar el destino concreto que se dará a esos fondos, cuyo desbloqueo deberá ser autorizado expresamente por el Gobierno mediante una ley o decreto. La normativa actual solo permite a las entidades utilizar el 20% de los mismos.

Según el presidente de la FEMP, Sánchez se ha comprometido a reunirse cada quince días con la entidad para continuar así con una vinculación que sitúa a los municipios al mismo nivel que las comunidades autónomas y los hace partícipes de la "arquitectura del Estado" dentro de sus competencias.

Para avanzar en el desbloqueo de fondos, la FEMP se reunirá esta misma semana con el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y con la vicepresidenta de Transición Ecológica, Teresa Ribera. Caballero ha pedido que a las corporaciones que no tengan superávit ni remanentes se les habiliten mecanismos de liquidez con la confianza de que las comunidades empleen parte de los recursos recibidos del Gobierno.

La lectura de los alcaldes del PP ha sido diferente. El regidor de Zaragoza, Jorge Azcón, portavoz del PP en la FEMP, tildó de "decepcionante" la cita porque, aseguró, "no ha dado respuesta a nada", a "ningún planeamiento ni propuesta". Resaltó que a la espera de novedades, se mantiene la limitación de gasto del 20% de los remanentes para necesidades sociales.