"Ser niño pobre en España es que se te rompan las gafas y no tengas dinero para comprar otras o no poder ir de vacaciones", una situación que afecta a uno de cada tres niños que viven en situación de pobreza relativa y que se ha agravado con la pandemia, según advirtió ayer el director de Unicef, Javier Martos.

Durante la presentación de la Memoria 2019, el presidente de Unicef España, Gustavo Suárez Pertierra, explicó que los niños españoles no tienen problemas de vacunación como en otros países donde se han paralizado para poder atender la urgencia generada por la Covid-19, pero sí les ha afectado mucho en ámbito educativo.

"El cierre de los colegios ha dejado fuera del sistema a una gran cantidad de hogares españoles que no disponen de acceso a redes; en los hogares y grupos más vulnerables hemos entregado ordenadores y tabletas, sobre todo en los centros de acogida" de menores.