Aunque los números de la pandemia en Galicia están por debajo de la media estatal en incidencia acumulada, la Consellería de Sanidade y el comité clínico de expertos que la asesora advierten "indicios" de una tendencia "creciente" y pretenden "cercenarla" antes de que vaya a más. Es una de las razones tras la restricción de las reuniones a un máximo de diez personas ya vigente para "cualquier evento familiar o social" en Galicia. Porque en esos foros, avisó ayer el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, se localiza la principal vía de contagios en la comunidad. También se pone el foco en los estudiantes universitarios, sobre todo en Santiago, donde el Sergas detecta una subida de positivos en el colectivo que podría extenderse a otras ciudades gallegas con campus. Integrantes del comité clínico apelan a la "responsabilidad" de los universitarios y de una "minoría" de hosteleros que incumplen las reglas con "fiestas ilegales" y a la "prudencia" de la población en general, en un contexto en el que, advierten, países como la República Checa se plantean un confinamiento y, sin ir tan lejos, Granada, cuyo repunte de casos vinculó el Ejecutivo andaluz a la vida universitaria.

Diez, la cifra límite para encuentros familiares y sociales. La Xunta ha visto "indicios" de un aumento del número de casos en los últimos días y ha decidido actuar para "cercenar" la tendencia si realmente es creciente. Además, en las cuatro provincias cada contagiado infecta a más de una persona. La apuesta por medidas "precoces" y "adelantarse a la curva", como comentó la directora xeral de Saúde, Carmen Durán, está tras la decisión de restringir "cualquier evento familiar o social", como indicó el secretario xeral de Sanidade, Alberto Fuentes, a un tope de diez personas, excepto entre convivientes. La medida, para grupos de personas y no para aforos, ya que estos son los establecidos en cada nivel para Galicia, no será aplicable, apunta, en actividades laborales, educativas y de formación reglada u ocupacionales y administrativas. Sí afectaría a las actividades en academias u otras actividades formativas de educación no reglada, como las autoescuelas; a cafeterías y restaurantes, donde no puede haber más de diez personas por mesa; a actividades de animación de hoteles, turísticas, de tiempo libre o en gimnasios y establecimientos equivalentes y en locales de juegos y apuestas, además de en bibliotecas y archivos (como clubes de lectura) y el espacio público en general (como hacer yoga al aire libre).

Cribados en las residencias universitarias. Sanidade y sus expertos inciden a actuar en las reuniones de familiares y amigos y en el momento "crítico" en el que alguien se quita la mascarilla porque es en esos contextos donde se producen la mayor parte de los casos, explicó el conselleiro. Aquí se incluyen las fiestas de estudiantes. En ellas incidió Sergio Vázquez, miembro del comité clínico, quien puso de ejemplo a Santiago, que es ya el segundo concello, tras Ourense, con mayor incidencia de Galicia, lo que ve "muy relacionado" con el curso universitario. "Estamos viendo incremento de contagios entre estos estudiantes sobre todo en Santiago, pero no sería extraño que esto llegara también a otras ciudades universitarias de Galicia", avisó. Por ello la Xunta ya empezó con cribado en residencias de estudiantes de la capital gallega que extenderá a todos los campus, en particular a A Coruña y Vigo. Por ello, Vázquez apeló a la "responsabilidad" de estos jóvenes porque "la causa de esto fundamentalmente", señaló, son las fiestas en pisos, pero también en ciertos locales de ocio nocturno o botellones. "Es una de las causas", dijo, por la que se prohiben las reuniones a más de diez personas en Galicia. El objetivo, recalcó, es evitar "medidas más duras" de restricción de movilidad, como en Ourense, o incluso confinamiento. "Intentar no hacer fiestas mientras no pase todo esto", demandó a los jóvenes. Este experto también urgió a usar la mascarilla "siempre y en todo lugar", mientras desde O Salnés el presidente de Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias en Galicia, Tato Vázquez, instó "a los jóvenes a pensar en su futuro" y se sumó al mensaje de "prudencia" para no llegar a plantearse el cierre completo como baraja Chequia. "Creo que no tenemos que llegar a esa situación", incidió, y pidió disculpas por si los profesionales sanitarios trasladaron al final de la desescalada la idea de que el virus había desaparecido y se podía volver a la "misma vida". Por el contrario, este especialista avisó, "el virus convive con nosotros y va a seguir mucho tiempo".

Con todo, la visión de las universidades gallegas acerca de la evolución de los casos de Covid-19 entre su alumnado se aleja del análisis y de la argumentación de la Xunta y de Santiago. Las instituciones defienden a sus estudiantes y esgrimen los datos de contagios registrados para demostrar que la incidencia en estas enseñanzas es "mínima" hasta el momento. Desde la Universidade de Santiago (USC) cuestionan que se pongan el foco "en exceso" sobre estos alumnos, informa Europa Press.

Las restricciones de los concellos. Carmen Durán desgranó las medidas de los concellos. La Xunta había avanzado que limitará la movilidad en los municipios de O Carballiño, O Irixo y Boborás -aunque se permite la circulación entre ellos- que se sumaría a lo que ya viven Ourense y su vecino Barbadás. En el caso de la ciudad de Ourense, son "relativamente optimistas" ya que parece que las medidas empiezan "a dar frutos", pero una tasa alta de positivos PCR aconseja mantener las restricciones. En O Carballiño, dijo, se produjo un número de casos "importante", lo que motiva la restricción, mientras en Verín que no bajen también conlleva medidas más limitantes. Finalmente se refirió a Celanova, que partía de cero casos. El que hayan aparecido y aumenten hace que se tomen "medidas precoces". Todos los municipios están en la provincia de Ourense y a la Xunta le preocupa la vulnerabilidad de su población por su edad.

Medidas proactivas. La Consellería de Sanidade no solo hace una busca activa de los casos en brotes, explicó Durán, sino que realiza cribados "sistemáticos" entre colectivos profesionales. Ahora anuncia el de residencias universitarias, que puede extenderse a otros ámbitos de la educación superior, señala Durán, pero ya se han realizado 144.000 pruebas entre menores de 40 años en las áreas de A Coruña y Santiago (35.000 test), personal educativo (41.000 entre Primaria y Secundaria), de guarderías (1.300) o residencias, temporeros (5.260) o sanitarios, farmacéuticos y policías (9.300). En ninguno de ellos la tasa de positivos llegó al 1%. Se va a ofertar a más colectivos sanitarios la prueba del coronavirus, avanzó, y posiblemente la próxima semana se inicie un cribado sistemático (cada 14 días) de todos los trabajadores de centros sociosanitarios.

Por ahora no se plantea un cierre de la hostelería. Por el momento, Galicia tiene activa toda la capacidad asistencial, aseguró el gerente del Servizo Galego de Saúde (Sergas), José Flores. También por el momento, como explicó el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, la medida de cerrar bares y restauración parece "no proporcionada" a la situación actual. No obstante, no descarta tener que recurrir a esta solución en el futuro.

Por ahora, en lo que trabajan los expertos es en un prot ocolo específico para el Día de Difuntos (que se conmemora el 1 de noviembre), "conscientes", admitió García, de la "sensibilidad" hacia este día en Galicia.