Agotada la vía del diálogo, los hospitales privados gallegos integrados en Ahosgal han decidido dar el primer paso para reclamar vía administrativa a Xunta y Gobierno central el pago de una compensación que rondará los 60 millones por haber puesto sus instalaciones, recursos y personal al servicio de la sanidad pública para combatir la pandemia de coronavirus durante el primer estado de alarma. Han encargado una auditoría que concretará los gastos que hubo en cada centro.