La situación de la pandemia en Galicia es estable, con tendencia descendente y niveles a la baja en las grandes ciudades, pero preocupa Pontevedra, según manifestó ayer el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña al informar de las últimas medidas recomendadas por el comité clínico. Entre ellas destacan los cribados, que pasarán a ser semanales en vez de cada quince días en las residencias de mayores. El comité analizará mañana la situación de las ciudades que mejor han evolucionado —Santiago, A Coruña y Ourense— y que el conselleiro considera que “se encuentran más cerca del objetivo” que permitirá la desescalada.

Galicia registró ayer 521 nuevos casos de COVID-19, con lo que los pacientes activos suman 8.638. El área coruñesa experimenta un ligero repunte al sumar siete casos hasta los 1.766, al registrar nuevos positivos. Permanecen ingresadas 531 personas (161 en el área coruñesa), de las que 97 están en UCI (35 en A Coruña). La cifra de fallecidos bajó a tres personas en las últimas 24 horas. Se trata de una mujer de 76 años ingresada en el Hospital de A Coruña, un hombre de 94 años de Ourense y una mujer de 85 ingresada en el Hospital de Monforte y procedente de la residencia de tercera edad DomusVi Monforte. Desde el inicio de la pandemia se han notificado más de 50.000 casos y casi 1.200 fallecidos.

El titular de Sanidade admitió que las medidas de restricciones en la hostelería son “durísimas” pero destacó que “existe un riesgo importantísimo”. Por eso agradeció la propuesta de los hosteleros para una “reapertura progresiva”, documento que la Xunta analiza, aunque al igual que el vicepresidente Rueda llama a la “prudencia” . Los responsables de la patronal del sector, sostienen que no está demostrado que la apertura de sus locales cause más contagios.

El comité clínico incorpora Moaña al grupo de municipios con mayores restricciones y mantiene bajo “observación específica” a las localidades de Ribeira y Dumbría, las ourensanas de Petín y A Rúa y la pontevedresa de A Lama, cuya evolución podría aconsejar incorporarlas. Hay 62 concellos con cierre perimetral y de hostelería.

Galicia compra tres millones de test de antígenos

La Xunta compra tres millones de test de antígenos, de los cuales 300.000 ya se están empleando en Atención Primaria y Urgencias, y otros 2,7 millones se empezarán a usar en las residencias de mayores. Así lo anunció ayer el presidente Alberto Núñez Feijóo, en el pleno del Parlamento gallego. El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, defendió el “resultado francamente bueno” que se está obteniendo de estas pruebas. “No es una herramienta nueva, pero vamos a ir avanzando en su uso y vamos a completarlo con situaciones concretas”, apuntó Comesaña, quien avanzó que se presentará en breve un programa de uso con la Consellería de Política Social y otros cribados que se determinarán con el comité clínico. El titular de Sanidade aseveró que el Sergas los empleará con la “normalidad” que lleva haciendo hasta ahora, sabiendo que como característica principal es que se trata de un “test rápido” a la hora de arrojar resultados. Las pruebas más fiables son los PCR, pero el resultado se demora más.