Pese a que las tasas de vacunación infantil superan el 95% en el conjunto del país, los adultos eran hasta este año mucho más reacios a inmunizarse contra la gripe. Nunca en los últimos veinte años —salvo en una ocasión, en el 2003— se había logrado llegar al objetivo marcado por el Sergas de que se vacunasen el 65% de quienes rebasan la edad de jubilación. Pero este año y cuando todavía falta un mes para que finalice la campaña ya se ha sobrepasado esta tasa y se ha batido récord: un 68,5% de los mayores de 65 años ya se ha inmunizado contra la gripe, según los datos publicados ayer por el Sergas, lo que supone la tasa más alta desde que hay registros (año 2001).

Tanto la Consellería de Sanidade como el Ministerio hicieron un llamamiento a la población para que este año más que nunca se inmunizasen contra la gripe. El objetivo es minimizar el impacto que podría suponer para el sistema sanitario la coincidencia en el tiempo de este virus y el COVID-19. La respuesta de los ciudadanos desbordó incluso las previsiones de las administraciones sanitarias ya que hubo escasez de vacunas en algunos momentos y tras un mensaje inicial de que cualquier persona podía vacunarse contra la gripe, llegó un momento en que se relegó a quien no era de grupos de riesgo a hacerlo cuando ya los mayores y estos colectivos estuviesen inmunizados. “El miedo a sufrir la gripe y que pudiera coincidir al tiempo con el COVID es lo que creo que ha movido a muchas personas a vacunarse este año, pero más por el miedo al coronavirus que a la propia gripe”, señala el Catedrático emérito de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidade de Santiago (USC) Juan Gestal.

Los datos de la campaña actual son de récord tanto en la cobertura como en las dosis utilizadas. Si en toda la campaña del pasado año se administraron algo más de 410.000 vacunas a mayores de 65 años en la comunidad gallega, hasta el pasado día 29 —y cuando todavía faltan otras cuatro semanas para que finalice la vacunación— ya se han utilizado 466.000, es decir, un 13,4% más. Lo mismo ocurre con la tasa de vacunación. El pasado año —y eso que había aumentado respecto a 2018—, se vacunaron un 60, 4% de los mayores de 65 años gallegos y en esta campaña ya lo han hecho hasta el momento el 68,5% de este colectivo.

La tasa ha aumentado en todas la franjas de edad que analiza el Sergas de forma semanal y son quienes todavía no tienen 70 años los más reacios. Un 59,5% de los gallegos de 65 a 69 años ya se ha inmunizado (el año pasado fueron el 46,9%), frente al 67,11% de los mayores de 70 a 74 años (la campaña anterior se cerró con un 58,7%) y el 71,7% de quienes rebasan los 75 (67% en 2019).

Pese a los buenos datos, todavía no se ha logrado el objetivo fijado para este año y que debido a la pandemia y tras las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es lograr que el 75% de quienes rebasan la edad de jubilación se inmunicen frente a la gripe. Solo Ourense (73%) y Lugo (72%) están a punto de conseguirlo pero si el objetivo fuese el del año pasado (65%) ya lo habrían logrado toda las demarcaciones sanitarias.

"La gente se vacuna más por miedo al COVID que a la gripe", dice un experto

Tras Ourense y Lugo —que ya el año pasado fueron las que más cobertura lograron—, le siguen Ferrol (68%, frente al 59% con el que cerraron el pasado año la campaña); Pontevedra (66,7%), A Coruña —que pasó de rozar el 60% en 2019 a superar ya el 66% sin haber finalizado la campaña— y Vigo, el área con menos porcentaje de inmunizados (65,9%, diez puntos por encima que el pasado año).

Los expertos tienen claro que el efecto pandemia y el temor al coronavirus ha influido en este incremento en la vacunación frente a la gripe pero reconocen que también hay falsas creencias en torno a esta inyección para que otros años no se lograse tal inmunización. “Existe mucha desinformación sobre la vacuna de la gripe y además el hecho de que sea una vacuna de cepa que obliga a inmunizarse cada año, hace que muchas personas no vean sus importantes ventajas”, indica Juan Gestal, quien se muestra poco optimista sobre si el aumento de este año se mantendrá en el tiempo. “Sería bueno que así fuera, pero me temo que no”, sostiene.

Hasta el momento no ha habido incidencia de gripe en la comunidad y Gestal reconoce que es similar a lo ya ocurrido en el hemisferio sur y que puede deberse a varios factores. “Puede influir la mascarilla, la distancia social o el incremento de las coberturas vacunales, pero yo creo que se debe a otras razones. Eso mismo sucedió durante la pandemia de gripe de 2009, sólo circuló el virus pandémico y no los virus estacionales. No sé si sería aquí aplicable el principio o ley de exclusión competitiva formulado hace años por el ecólogo ruso Georgii F. Gause, que afirma que dos especies no pueden ocupar un mismo nicho ecológico en el mismo hábitat al mismo tiempo, algo así como las águilas que no vuelan juntas”, sostiene Gestal, quien anima a vacunarse frente a la gripe. “Yo hace años que lo hago y ya no me acuerdo la última vez que la tuve”, sostiene.