Un 9,9% de los españoles ha pasado el COVID-19 y ha desarrollado anticuerpos, lo que supone un total de 4,7 millones de personas —el doble que hasta el pasado mes de julio—, según la cuarta ronda del Estudio Nacional de Seroprevalencia ENE-COVID, elaborado por el Ministerio Sanidad, junto al Instituto de Salud Carlos III, el Instituto Nacional de Estadística (INE) y con la colaboración de las comunidades.

Galicia, excepto la provincia de Ourense, sigue muy por debajo, casi a la mitad de la media nacional, respecto al número de contagios y desarrollo de anticuerpos frente al SARS-CoV-2, con datos de la segunda quincena de noviembre. No obstante, duplica los datos de la ronda anterior. De este modo en Ourense el porcentaje de personas que actualmente tienen anticuerpos se sitúa en el 6,2%, frente al 2,5% previo; en la provincia de Pontevedra tienen el 4,8% frente a al 2,1% anterior; en Lugo el 4,3% frente al 2,1% de la tercera ronda y A Coruña pasa del 1,6% al 3,8% actual. La provincia coruñesa es la segunda con menor tasa de personas que hayan pasado el virus de todo el país, solo por encima de Tenerife (3,5%). En los datos gallegos hay que resaltar que ahora se detectan seis de cada diez infectados y en las rondas anteriores eran muchos menos.

El estudio refleja una importante variabilidad geográfica de los resultados, al igual que en las rondas anteriores. Mientras en el núcleo central de la península la prevalencia global se acerca e incluso supera el 15 %, hay provincias en las que la prevalencia no llega al 5%. Cuenca, Soria y Madrid tienen una prevalencia por encima del 18% mientras que por debajo del 5% se sitúan ocho provincias:las tres gallegas, las dos canarias, Valencia, Huelva y Córdoba.

La tercera ola del estudio, realizada hasta julio, concluyó que el 5,2% de los españoles tenía anticuerpos IgG, es decir, poco más de dos millones de personas. Los resultados dados a conocer ayer, indican que entre julio y noviembre, dentro de la segunda ola, se infectaron aproximadamente el mismo número de personas en España que en la primera ola, según indicó la directora del Instituto de Salud Carlos III , Raquel Yotti.

A pesar de la mayor prevalencia de personas con anticuerpos en Cuenca, Soria y Madrid, Yotti rechaza que en estas provincias se haya alcanzado inmunidad tipo rebaño que permitan relajar las restricciones. En el informe no se observan diferencias en la seroprevalencia entre hombres y mujeres, si bien los porcentajes son menores entre los niños, y muy similares en los demás rangos de edad.

El porcentaje de personas seronegativas en la primera fase del estudio que ahora tienen anticuerpos IgG detectables (tasa de seroconversión) se sitúa en un 3,8%, un porcentaje mayor que el 0,7-0,9% detectado en las primeras rondas. El porcentaje de asintomáticos en relación con el total de positivos se estima en torno al 30%.

Con respecto a las personas trabajadoras en activo, el personal sanitario (con un 16,8%) y las mujeres que cuidan a dependientes en el domicilio (16,3%) presentan las cifras más altas de prevalencia global. También es significativamente mayor en mujeres ocupadas en tareas de limpieza (13,9%) y en mujeres trabajadoras del sector sociosanitario (13,1%).

La tasa de seroconversión entre participantes que desde el verano han convivido con casos conocidos o sospechosos de COVID-19 se multiplica casi por diez con respecto al porcentaje global de seroconversión: se sitúa en un 35% en convivientes de caso confirmado y en un 26,3% en convivientes de personas con síntomas COVID-19. El número de participantes en esta cuarta ronda del estudio del Ministerio fue de un total de 51.409 personas, número inferior a los estudios anteriores.