Solo los españoles o quienes residan de forma habitual en el país podrán viajar entre Reino Unido y España a partir de hoy, tras la decisión del Gobierno —de manera conjunta con Portugal— de suspender todos los vuelos entre los dos países excepto para el traslado de este tipo de pasajeros. Además, también se reforzará el control fronterizo en Gibraltar, según informó Moncloa. Así lo acordó tras la reunión del mecanismo de crisis de la Unión Europea, que ayer analizó los efectos de la nueva variante del coronavirus detectada en Reino Unido, y pidió que se eviten los viajes no esenciales.

España había decidido esperar a que la UE estudiara el modo de reaccionar de forma conjunta ante esta nueva variante, antes de tomar una decisión unilateral, a pesar de que hasta quince países europeos habían adoptado ya medidas al respecto. Es el caso de Bélgica, Austria, Letonia, Países Bajos, Italia, Austria, Irlanda, Francia, Bulgaria, Polonia, República Checa, Finlandia, Dinamarca, Hungría y Suecia, cuyos gobiernos ya habían decidido la suspensión de los vuelos. Solo en el día de ayer se produjeron unos 200 entre España y Reino Unido, donde residen casi 250.000 españoles.

“Somos un gobierno que representa una sociedad muy europeísta y nos gusta mucho que los asuntos que nos afectan a toda Europa sean prudentes y equilibrados, y que el conjunto de Europa reaccione por igual frente a cualquier circunstancia de un país que decidió abandonar la UE”, justificó la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, antes de que España decidiera también suspender parte de los vuelos desde Reino Unido.

El líder del PP, Pablo Casado, señaló que el Gobierno de Sánchez “está llegando tarde siempre” y “está echando la culpa a los demás” cuando algo falla. “Si la movilidad interna en España se delega en las comunidades y la movilidad internacional se delega en la Unión Europea, entonces ¿para qué está el Gobierno?”, planteó.

En su comunicado, Moncloa insiste en que era necesario esperar a que Bruselas determinara que había que tomar medidas coordinadas y explica que la decisión de España se ha adoptado de manera concertada con Portugal.