Mujer vacunada en París. | // EFE

Primeros en Alemania. | // EFE

Una enfermera en Polonia. | // EPA

En compañía de una meteorología desapacible en buena parte del continente —la borrasca Bella dejó fortísimos vientos en Francia o Bélgica, así como en España— la Unión Europea inició ayer las campañas de vacunación contra el COVID-19 haciendo piña. Una operación sanitaria y logística sin precedentes que aspira a convertirse en el símbolo de la respuesta conjunta y solidaria de la UE a la mayor pandemia en 100 años. De manera simultánea y desde la fábrica en la localidad belga de Puurs, las dosis de la vacuna de la farmacéutica alemana BioNTech y la estadounidense Pfizer llegaron a todos los rincones del continente. Y al mismo tiempo. Detrás, la gestión de la Comisión Europea, que negoció las mismas condiciones de precio y distribución para todos los Estados de la UE.

Italia.

A las 07.30 horas, dos sanitarios italianos estrenaban el fármaco en el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas Spallanzani en Roma.

Francia.

Entre las primeras en recibirla, una mujer de 78 años de la unidad de cuidados de larga duración para personas mayores del Hospital René-Muret de Servant, en Seine-Saint-Denis, a las afueras de París. Una de las zonas más castigadas por la pandemia del coronavirus.

Austria.

Cinco ancianos fueron los primeros austríacos en ser inoculados contra el coronavirus con la vacuna de Pfizer/BioNtech en Viena, ante el incesante avance de los contagios en el país centroeuropeo, que se encuentra desde el sábado nuevamente en estado de estricto confinamiento social y económico.

Alemania.

También se aplicaron en centros de mayores y algunas imágenes muestran colas en exteriores de edificios. No obstante, Alemania se adelantó a la fecha establecida por la UE y el sábado se vacunaron 40 residentes y 10 empleados de una residencia de Sajonia (entre ellos, una mujer de 101 años). Ese adelanto ha generado cierta tensión entre el ministro de Sanidad, Jens Spahn, y las autoridades de los Länder.

Polonia.

Las autoridades polacas empezaron ayer la campaña de vacunación con el personal sanitario, de acuerdo al plan para tratar de inmunizar en primer lugar a ese grupo de profesionales, en medio del ascenso de contagios.