La Xunta se plantea no aliviar restricciones para Fin de Año como hizo en Nochebuena y Navidad a la vista de que se ha disparado la tasa de positividad. Podría no permitir la movilidad entre concellos e incluso podría imponer un cierre total de la comunidad, como ya hizo Valencia. Sí podría volver a ampliar el toque de queda, que ahora es a las once de la noche. El día 24 se alargó hasta la una y media de la madrugada.

La decisión la tomará hoy el comité clínico, pero el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, admitió ayer su “preocupación” por los últimos datos sobre la pandemia en Galicia. De cada cien pruebas PCR para detectar infectados de coronavirus, ocho dan positivo, cuando la OMS ha establecido que la situación se descontrola a partir del 5%. El día anterior la tasa de positividad ya era del 7%.

Los resultados son muy desiguales por áreas sanitarias. El peor dato lo registra Santiago con un 13%, Pontevedra con un 10; Vigo con un 9% y A Coruña, con un 7,5%. Están por debajo del umbral fijado por la Organización Mundial de la Salud: Ourense con un 4%, Lugo con un 3,2% y Ferrol, con un 2,8%.

La Xunta ya había advertido que el Plan de Navidad podía sufrir ajustes en función de la evolución de la situación epidemiológica. Estos días con mucha gente de vacaciones han preocupado las imágenes del centro de las ciudades y villas repletas de gente. Es más que plausible que se vuelvan a disparar los casos tras las fiestas. Los sanitarios y científicos que se sientan en el comité clínico siempre son partidarios de restricciones elevadas para contener el avance del coronavirus. Y más ahora que estamos en la recta final con el inicio del proceso de vacunación. Se trata de pedir un sacrificio más para no arruinar lo logrado cuando estamos “a punto de alcanzar la orilla”, ha dicho Alberto Núñez Feijóo en más de una ocasión.

El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, explicaba ayer que la tasa de positividad “depende de si se hacen más cribados o menos” y en la comunidad se han hecho menos por las fiestas. Ayer Sanidad informaba de 3.000 PCR diarias, la mitad que la jornada anterior, pero el máximo responsable del Sergas justificó que la última actualización recoge las cifras de la jornada de Navidad. Es más, al conselleiro el número de pruebas realizadas le parece “especialmente alto para las fechas en las que estamos”. También apuntó que en los días previos a Nochebuena las pruebas “fueron creciendo” todos los días gracias al registro de viajeros que llegaron a la comunidad gallega y al de los estudiantes que volvieron a sus domicilios familiares.

Comesaña prometió que el Sergas continuará haciendo PCR “al máximo” de su capacidad actual, además de los test de antígenos que ya se practican en la Atención Primaria y en los servicios de Urgencias de los hospitales.

En Galicia, en este momento hay 5.609 personas con coronavirus. Son 107 menos que hace 24 horas, aunque los nuevos casos son 236, una cifra que también cayó (138 menos que un día antes). El área coruñesa cuenta con 873 casos (28 menos que el sábado) al detectarse 32 positivos y darse 64 altas.

El número de hospitalizados por COVID-19 si se ha incrementado, tanto en planta como en UCI. Según los últimos datos facilitados por el Sergas, hay 336 personas hospitalizadas, ocho más. De estos pacientes, 58 estén en la unidades de críticos. En A Coruña son 79 los ingresados y 18 en UCI.

En la jornada en la que se inició la dispensación de la vacuna de Pfizer contra el COVID, los datos muestran que se han infectado hasta el momento en Galicia un total de 61.375 personas, y otras 54.402 se han curado. El número de fallecidos asciende a 1.370 tras la muerte de una mujer de 82 años en Vigo. Se trata de la cifra más baja de en dos meses. En total se han realizado en Galicia 1.091.724 PCR.

Illa pide que “las alegrías de hoy no sean lloros el Día de Reyes”

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, alertó ayer que la situación epidemiológica en España es “preocupante” y señaló que la razón es la relajación de medidas durante el pasado puente de diciembre. “Que las alegrías de estos días no sean lloros el Día de Reyes”, rogó el ministro para luego volver a apelar a la “prudencia”. “No podemos bajar la guardia, en particular los días de Navidad, que tendemos a aumentar la movilidad”, advirtió Illa y dijo esperar que más comunidades aumenten las limitaciones, tras la decisión de Extremadura del sábado de imponer nuevas restricciones. “Los datos son preocupantes. Hay un cambio de tendencia que se registró la semana pasada. Veníamos de cinco semanas de descenso y esto se interrumpió”, explicó en el día de ayer. La incidencia acumulada en España superó esta semana otra vez el umbral de riesgo extremo estipulado por Sanidad de 250 casos por 100.000 habitantes en catorce días, al llegar a 266. Por otra parte, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, explicó que los cuatro casos de la nueva cepa británica de COVID confirmados en la Comunidad de Madrid son leves y corresponden a personas que se desplazaron desde el Reino Unido a España con anterioridad a que se conociera la presencia de esta variante del virus. Y los cuatro se había hecho con anterioridad una PCR, que había dado negativa. Illa explicó además que técnicos del Ministerio de Sanidad y de la Consejería madrileña están en permanente contacto para analizar la evolución de estos pacientes que, por el momento, están leves y no presentan “síntomas de gravedad” tras contagiarse con la variante británica del virus.